DOTACIÓN DEL BUQUE ESCUELA ESMERALDA RESCATÓ AVE EN ALTA MAR
Durante el tránsito de Valparaíso a Wellington, en el marco del 64° Crucero de Instrucción, un grupo de guardiamarinas e invitadas nacionales e extranjeras de la dotación del Buque Escuela Esmeralda se encontraron con una sorpresa en la cubierta: un pequeño petrel había encontrado cobijo en el acceso de la Unidad durante un temporal.
“Con la Subteniente de Carabineros Lucia Cifuentes caminábamos por la cubierta de buque cuando comenzó un fuerte diluvio y nos encontramos con una pequeña ave que medía aproximadamente unos 10 cm, era de color negro con un poco de blanco en su pecho y debajo de sus alas, sus patas diferentes al resto, era lógico ya que era de especie acuática” relató la Teniente de Corbeta de la Armada de Colombia, Juliana Moncayo.
“Creímos que podía haber estado migrando y cuando hubo cambio de las condiciones meteorológicas éste pudo haberse golpeado con una de nuestras velas”, agregó Moncayo.
Ante esto, y debido a las condiciones meteorológicas del momento, las jóvenes consideraron que peligraba la supervivencia del ave y decidieron cobijarla.
“Empezó a llover con más fuerza y el viento a aumentó su intensidad, sabíamos que si lo dejábamos ahí podía morir, así que decidimos llevarlo a la Sala de Navegación, alertando a los guardiamarinas que se encontraban de guardia para el cuidado del polluelo, quienes entre risas accedieron, diciendo que lo nombráramos ‘Chimuelo’, y así fue”, profundizó Moncayo.
Posteriormente, el petrel fue llevado al entrepuente (lugar donde descansa la tripulación) de guardiamarinas femeninas, donde lo cuidaron hasta recalar una semana después a Wellington, en Nueva Zelanda.
“Creo que al final todos poco a poco nos fuimos encariñando con el ave. Todos aportamos para que éste sobreviviera. Tratamos de identificar el ave y saber que comía para poder alimentarlo adecuadamente, lo más parecido a Chimuelo era un Petrel Negro, un ave acuática, por ende su alimentación consistía en cierta comida de mar, lo más parecido a esta comida era el atún, así que durante el tiempo que estuvo con nosotras lo alimentamos así”, indicó la Teniente colombiana.
Finalmente, a la recalada, se preocuparon de entregarlo en el centro de cuidado de animales “Margaret Doucas Animal Hospital” en Wellington, perteneciente a la red SPCA (Society for the Prevention of Cruelty to Animals – en español Sociedad para la Prevención de la Crueldad contra los Animales).
Cuando llegaron al recinto, lo recibieron con agrado, quienes indicaron que derivarían al petrel al zoológico donde le brindarían ayuda para su pronta recuperación.
Desde su etapa formativa los más jóvenes de nuestra Institución demuestran preocupación por la fauna marina. La importancia de la preservación del medio ambiente acuático y el resguardo sus ambientes y ecosistemas constituyen una de las funciones primordiales de la Armada de Chile.