Docentes de la Sede Viña del Mar USM entregan consejos para jugar al volantín sin sufrir accidentes
Marcelo Morales, de la carrera de Técnico Universitario en Electricidad y Alex Rojas, de Técnico Universitario en Prevención de Riesgos; describieron los peligros de este tradicional juego y entregaron recomendaciones para que su práctica no conlleve a desgracias.
Se acercan las Fiestas Patrias y los niños comienzan a hacer del volantín uno de los juegos más practicados. Sin embargo, esta tradición dieciochera puede conllevar algunos peligros, que son abordados por Marcelo Morales y Alex Rojas, docentes de la Sede Viña del Mar de la Universidad Santa María.
En primer lugar, Marcelo Morales, docente de la carrera de Técnico Universitario en Electricidad, explicó los peligros que puede generar el jugar al volantín cerca del tendido eléctrico. Según expresó el profesor, el primer caso que se puede dar es que “cuando hacen estos hilos envidriados, los cuales se convierten en verdaderas guillotinas, muchas veces cuando caen se apoyan sobre los conductores y los niños, al empezar a recoger el carrete, los cortan”, advirtiendo que aunque “el cobre sea un metal, el vidrio lo va cortando. Las líneas aéreas más comunes son de 4, 6 y 10 milímetros, y esas las corta el hilo”.
Esta situación, indicó el experto, puede ser sumamente peligrosa, ya que los conductores, al “caer a la tierra pueden hacer contacto con personas, con casas o vehículos y pueden hacer mucho daño en ese sentido”. El docente agregó que “lo ideal es que si cae un cable a tierra, esta inmediatamente haga contacto y bote las protecciones, pero si queda en el aire y alguna persona se acerca, se electrocuta”.
Morales también expresó que jugar al volantín con hilo convencional también puede conllevar riesgos, si es que llega a engancharse al tendido eléctrico. “También es peligroso en el sentido de que esté húmedo o con alguna propiedad conductora, y que pueda transmitir la energía desde los cables a las manos de los niños. Hay que recordar que ellos siempre están parados en cualquier lugar y eso ayuda a que la resistencia sea mucho más baja y que lo termine electrocutando”.
Mantener el cuidado
Para evitar los riesgos asociados a la costumbre de encumbrar volantines tales como electrocución, heridas cortantes u otras posibles desgracias, Alex Rojas, jefe de la carrera de Técnico Universitario en Prevención de Riesgos, comentó los resguardos que hay que considerar para que los niños jueguen sin sufrir accidentes.
“Lo primero es actuar sobre los peligros, es decir, sobre aquellas acciones o condiciones del medio que pueden generar un daño. Los peligros que hay que tener en cuenta, y por ende, evitar, son encumbrar volantines cerca de tendido eléctrico, en sitios cercanos a tránsito de vehículos, utilizar hilo curado y encumbrar volantines sin la supervisión de algún adulto”, explicó el docente, quien recomendó no realizar estas acciones para evitar los riesgos de cortes, electrocución, caídas u otro tipo de problemas.
Para el profesor, lo principal es que los adultos estén presentes en el lugar para que puedan evitar las situaciones peligrosas. “Si ellos están ahí, no deben permitir, por ejemplo, que los niños salgan corriendo a buscar volantines cortados, ya que existe el riesgo de golpes por tropiezo”. Además, agregó que “el volantín tiene que encumbrarse en sitios eriazos, con bastante espacio, sin tránsito de vehículos y tendido eléctrico y por ningún motivo utilizar hilo curado”.
El profesor recomendó además no jugar al volantín en la noche, a pesar que durante este horario puedan generarse mejores condiciones de viento, ya que la falta de visión puede acentuar los riesgos mencionados anteriormente.
Finalmente Rojas, hace un llamado al autocuidado, “es muy importante que los adultos eduquen a los niños sobre la importancia de tomar en cuenta estas medidas para ir formando en ellos una cultura preventiva, concientizándolos de tal forma que sean ellos, los niños, los que transmitan estos valores a sus amigos”.