Como es tradicional, durante las primeras semanas de marzo, los diversos planteles de educación superior realizan el rito del “mechoneo”, actividad con que se da la bienvenida a los alumnos de primer año que se integran a sus respectivas universidades, pero que muchas veces se transforma en un desagradable momento para los nuevos estudiantes.

En el caso de la Universidad Adolfo Ibáñez (UAI), desde el año 2007 se decidió cambiar este ritual de recepción por un “Mechoneo Social”, cuyo objetivo es realizar actividades para ir en ayuda de los sectores más vulnerables de la región.

Por ello, más de 300 estudiantes de primer año de este plantel educacional llegaron hasta el sector de Monte Sinaí, en Miraflores Alto -una de las zonas más afectadas por los incendios de febrero del año pasado- para efectuar trabajos de desmalezamiento, limpieza para la prevención de futuros siniestros (a través de la construcción de cortafuegos) y mantención a la plaza y la biblioteca existentes en este comité de viviendas.

En esta actividad, que contó con el apoyo del municipio viñamarino, estuvieron presentes la alcaldesa Virginia Reginato, el prorrector de la UAI, Claudio Osorio y la presidenta de la sede Monte Sinaí, Luisa Muñoz, además de representantes de CONAF y la Cruz Roja.

La primera autoridad comunal destacó que “se trata de una excelente iniciativa de estos alumnos de la universidad Adolfo Ibáñez, que beneficia directamente a cientos de familias de este sector, que resultaron tan afectados por los incendios del año pasado. El hecho que los propios estudiantes se comprometan con su comunidad, y en especial, con las personas más vulnerables, es una muestra de los valores y la sensibilidad social que deben predominar en nuestros estudiantes, y por ello, desde el municipio siempre apoyaremos este tipo de actividades”.

Por su parte, el prorrector de la UAI explicó que “estamos aplicando un cambio de paradigma, con el objetivo de tratar de acercar a los estudiantes a su entorno y que desarrollen un trabajo comunitario y de ayuda social. Acá están los alumnos de primer año, que se acaban de integrar a clases y ya tienen un contacto importante con la realidad, en una iniciativa que hemos desarrollado desde hace 6 años y que ha resultado muy positiva”.

Los jóvenes trabajaron desde las 9 hasta las 15 horas en el sector, apoyados por la presencia de 2 camiones, funcionarios municipales equipamiento y herramientas para efectuar la limpieza y desmalezado, además de personal de CONAF en la coordinación de la construcción de los cortafuegos.